George Russell y Max Verstappen protagonizaron una colisión dramática durante las últimas etapas del Gran Premio de España 2025, que tuvo un impacto significativo en el resultado final de la carrera y generó una gran controversia en el mundo de la Fórmula 1.

El incidente ocurrió tras un reinicio bajo Safety Car en el circuito de Barcelona, después de que el Mercedes de Kimi Antonelli se retirara por un problema mecánico, lo que llevó a la mayoría de los pilotos punteros a hacer una parada adicional en boxes. Verstappen, que estaba con neumáticos duros, quedó en desventaja frente a rivales con neumáticos blandos, incluido Russell, quien intentó adelantarlo aprovechando esta situación.

Durante la reanudación, Verstappen fue instruido por su equipo, Red Bull, para ceder la posición a Russell después de que este último lograra superar a Charles Leclerc en la primera curva. Sin embargo, tras ceder la posición, Verstappen aceleró de forma brusca y colisionó con el Mercedes de Russell en la curva 5, lo que llevó a que la FIA le impusiera una penalización de 10 segundos y le añadiera tres puntos de penalización en su superlicencia, sumando un total de 11 puntos, muy cerca de la suspensión automática por acumulación de puntos.

Russell calificó la maniobra de Verstappen como “deliberada” y expresó su preocupación por el ejemplo que este tipo de acciones podría dar a los jóvenes aficionados. Verstappen, por su parte, reconoció que fue un “error de juicio” y mostró frustración por la situación, aunque evitó profundizar en el tema en entrevistas posteriores. La penalización relegó a Verstappen del quinto al décimo lugar en la clasificación final de la carrera.

La decisión de la FIA fue objeto de debate, ya que algunos consideraron que la sanción podría haber sido más severa, incluso con una posible descalificación, dada la naturaleza del choque. Sin embargo, el comisario Derek Warwick defendió la actuación de los jueces y consideró que la penalización aplicada fue la correcta.

Este incidente ha aumentado la tensión entre ambos pilotos y sus equipos, Red Bull y Mercedes, y ha puesto a Verstappen al borde de una suspensión para futuras carreras, lo que añade un componente adicional de presión en las próximas competencias del calendario.

En resumen, la colisión entre George Russell y Max Verstappen en el Gran Premio de España 2025 fue un momento clave que no solo afectó la carrera en sí, sino que también ha tenido repercusiones en la lucha por el campeonato y en la dinámica de la Fórmula 1 actual.